La empresa Plyrap, con sede en Venado Tuerto, participó por primera vez en la 137ª edición de la Feria de Importación y Exportación de China, conocida como la Feria de Cantón. Se trata del evento comercial más grande y longevo del mundo, que reúne a más de 35.000 expositores y se extiende sobre 1,5 millones de metros cuadrados.

Guillermo Merino, titular de la firma, dialogó con el programa Según cómo se mire de Radio Mitre Venado Tuerto (100.3) y compartió su experiencia en el gigante asiático. “Primero parecía imposible, pero llegamos. Fue increíble”, relató. Acompañado por su hijo —quien lo asistió con el idioma—, Merino formó parte de una misión comercial organizada por la provincia, que convocó a 20 empresas argentinas.

Durante su visita, no solo descubrió una infraestructura industrial impactante, sino que también abrió canales para futuros negocios. “Ya estamos en contacto con un frigorífico porque una empresa que nos vendió insumos está interesada en importar carne argentina. Pidieron un contenedor de muestras”, detalló.

Merino subrayó el potencial del mercado asiático para productos alimenticios y agrícolas: “Creo que podemos duplicar la producción de granos y aumentar la de carne. Ellos compran pollo, cerdo, cordero… pero hoy no tenemos frigoríficos de pequeños animales en nuestra región”. A su vez, valoró el acceso directo a insumos que no se fabrican en Sudamérica y que ahora podrán negociarse de manera más eficiente: “Una batería de gel que pagábamos 15 dólares allá vale cinco”.

El empresario también destacó la disciplina y el orden que observó en China. “No hay cortes de calle, todo está limpio, no ves un graffiti. Las empresas trabajan 24 horas. Eso te hace pensar en cómo nos falta organización”, expresó.

Pese a los desafíos que enfrentan las industrias argentinas, Merino se mostró optimista. “Hace 35 años que estoy al frente de la empresa y siempre crecimos, con todos los gobiernos. Lo mejor que puede pasar es que al gobierno le vaya bien. A este, al anterior y al que venga”.

Finalmente, anunció que ya proyecta volver a participar en la feria el próximo año, aunque con una preparación distinta. “Fue un primer paso. Estoy en plena transición generacional con mis hijos y apuesto a que ellos lideren este nuevo camino”, concluyó.